Quiero hacer una acusación seria, bueno,
un mea culpa también.
Empezaré así:
En mi corta
experiencia de vida y con el inicio de mi vida profesional, he conocido y visto
a muchas personas que gustan de hablar mucho, o mostrar lo que saben hacer, mostrar
lo felices, tristes o enojados que están, tal vez en redes o tal vez
contándoselo a alguien porque necesitan hacerlo, tan simple como eso.
Tal vez
la primera idea que venía a mi cabeza era: “pobre niña/o solo quiere atención”
Es decir reducía toda la complejidad de un ser humano en algo tan absoluto como
eso. Tal vez por qué no... negando mi propia naturaleza, porque creí o me hicieron creer que
eso estaba mal. Entonces me reprimí, antes de hablar pensaba las cosas muchas
veces (ya saben para no sonar tonta), Cree un graaan mounstro que realmente fue construido
desde el miedo a no ser aceptada. Pero… si el miedo impide que vivas una
genuina forma de ser, de existir de… ¡VIVIR! ¿Lo hace válido? ¿Tener miedo justifica
negarte? ¿Hacerte más pequeño? ¿Anularte?
Recién hace
unos días pude verlo clarito, tratar de ser coherente todo el tiempo agota, te
invita a vivir en la perfección, en la exigencia, en la ansiedad: autosabotaje, (o la triada del autosabotaje como yo lo llamo) porque creas una
voz interna que te repite todo el tiempo que así como eres no está bien y así, no te das la oportunidad de descubrir
quién eres y todo lo que puedes lograr.