jueves, 10 de septiembre de 2020

ENEMIGO EN COMÚN


ENEMIGO EN COMÚN


Al menos por mi parte y durante largo tiempo, sin querer decidí no reconocerlo, confiando en mi capacidad de adaptación y resistencia al estrés, esa que sientes cuando las cosas no salen como quieres. Ese es mi súper poder. 
Pero muy diferente a lo esperado, esto pudo más que lo que alguien pudo haberse imaginado, curiosamente, aún lo sigo viendo como un suceso lejano, cómo si no estuviese pasando, aunque esa sea la causa por la que trabajo arduamente todos los días. Siempre cuando miro con distancia situaciones así, me pregunto: ¿Cómo pude? ¿De dónde salió tanta fuerza?
De alguna manera esto nos pasa a todos, este hecho nos trajo por un momento, la ilusión de que estamos juntos en esto, de alguna manera todos sentimos miedo e incertidumbre, pero ya es más que obvio que luchamos con distintas armas y recursos. 
Esta vez este hecho no distinguió entre hombres y niños, ni entre mujeres ni ancianos, nos unió de esa forma, no le importaron edades, géneros ni condiciones sociales.
¿Cómo hablaremos de esto en el futuro?
La razón principal por la que escribo esto, es que pensándolo... tal vez todos dentro de la longitud de nuestras casas, viendo el ancho y largo de nuestras paredes, creemos que somos los únicos que estamos sufriendo así, cuando realmente, ningún dolor es más pequeño que otro, ni más válido, ni más importante, por que como dije: "cada uno y desde su trinchera" busca seguir adelante. 
No sufras más pensando en que a ti te toca más duro que a otros, porque siempre vas a encontrar dolor y menosprecio hacia ti mismo, mientras veas a los demás y te descubras comparando miserias, dones o tal vez privilegios. 
Si te das cuenta realmente no sirve de mucho compararte. Desde cualquier punto, en cualquier circunstancia, es un sucio truco mental, que te desvía de tus propios sueños y anhelos, que te distrae, que te te engaña para dejarte siempre justo ahí, porque es lo que conoces, eso es lo que te has creído que mereces.
¿Te cuesta verte lejos? ¿Exitoso? 
¿Qué pasa cuando no puedes soñar ni siquiera, para ti mismo?
o decir en voz alta lo que realmente quieres lograr. 
¿Qué te detiene?
Al final estamos todos, buscando la forma de seguir resistiendo, reinventándonos, demostrándonos que somos capaces de hacer hasta las cosas que juramos nunca hacer, y aunque duela reconocer... se sienten bien. 
Busquemos encontrar oportunidades ante los obstáculos o que al menos estos sirvan, para replantearnos el presente y hacia donde estamos yendo.

Ha ocurrido un hecho. Que, nos guste, o no, con o sin nuestro permiso, se metió en nuestras vidas cambiándolas por completo de manera abrupta, cual intruso que no es invitado, ni consulta para entrar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si estás interesado en un tema en especial, déjame tu comentario y en el siguiente blog haré una mención sobre tu colaboración. Difundamos juntos Psicología!

En las crisis replanteamos nuestros conceptos de vida.

  Cuando tu forma de ser no hace ruido. ¿Te has preguntado qué pasa con las personas que se ven perfectamente cómodas con su forma de ser? ¿...